La vida… un hermoso viaje por el aprendizaje.
Según la RAE (Real Academia Española) hay 18 acepciones de la palabra vida. Quiero compartir las tres primeras:
- Fuerza o actividad esencial mediante la que obra el ser que la posee.
- Energía de los seres orgánicos.
- Hecho de estar vivo.
La vida es la cualidad que poseemos por el hecho de haber nacido y nos permite gozar, aprender, sentir, desaprender, crecer, relacionarnos.
Pero la muerte, también forma parte de la vida. Es el final de la misma y deberíamos tener igual conocimiento que del nacimiento. No obstante, culturalmente en nuestra sociedad, el final de la vida es temido, no se habla de ello y por eso nos cuesta tanto afrontarla.
Durante estos días de duelo, me he dado cuenta que yo misma tengo todos estos sentimientos encontrados y creía tener trabajados, pero no. Así que voy aprovechar para trabajarlos más, para informarme, llevarlo mejor y que no me afecte tanto como lo está haciendo. Con una mente abierta y receptiva, como soy yo. Eso no quiere decir que no podamos sentir la pérdida, pero sentirla sin dolor ni miedo.
¿A qué hemos venido al nacer? A vivir con todas las condiciones, a aprender y mejorar nuestra experiencia, a disfrutar, sentir, reírnos, compartir desde el amor. Pues desde aquí, desde el amor todo es más fácil, todo es más bonito, todo es más simple.
Y es un trabajo aprender a sentir amor propio, amor ajeno… pero de verdad, sin condiciones.
La vida es fugaz y debemos plantearnos qué queremos para nuestra vida. Trabajar por ello, pues es lo que nos ayudará a sentir éste amor, compartirlo y vivir sin miedos.
Conquístate cada día para ser tu mejor versión. Por hoy, solo hoy. Y mañana repite. Sé feliz hoy y mañana, repite. Sé alegre hoy y mañana, repite. Ama hoy y mañana, repite. Querer controlar el futuro nos da miedo, inseguridad, con lo cual vive hoy y conquístate hoy. Y mañana vuelve a empezar.
Ten sueños y trabaja por ellos, pero desde el aquí y ahora. Vivir en el presente agradeciendo lo que somos, lo que tenemos, nos aporta paz y tranquilidad y más seguridad para afrontar todos los retos que nos plantea la vida. Pues así, tenemos una visión más amplia, más abierta para tratar la vida y tomar decisiones desde la calma.
No nos rindamos. ¡Estamos vivos y seguimos con la gran oportunidad de hacer algo grande. Salgamos con fuerza, confianza y amor a conquistarnos nosotros mismos. Así llegaremos a conquistar cualquier cosa que queramos y sintamos.
Bienvenida a la vida, a los sueños, a los aprendizajes, al amor… suelta todo aquello que no te sume, que no te aporte valor. No lo mereces. ¡Merecemos lo mejor hoy, mañana y siempre!